"Disfruta del fútbol y no te preocupes de nada más"

martes, 29 de enero de 2013

Sevilla-Granada


Justa y merecida victoria del Sevilla anoche en el Pizjuán ante un Granada flojo, falto de intensidad, sin ideas y sobrepasado por un rival que recuerda al Sevilla de hace no tantos años, aquel que paseaba por Europa como Pedro por su casa. Anquela sorprendía con un trivote en el centro del campo, con dos mediapuntas delante, renunciando a las bandas. No era tan descabellado si vemos la actitud del nuevo Sevilla.

Y es que Emery les ha transmitido a sus jugadores esa lucha y esa entrega que les hacía falta. Ahora el Sevilla no espera atrás, sino que presiona arriba la salida del balón, obligando al equipo rival a jugar al pelotazo. Por si fuera poco, una vez que el épico repliega, dejan arriba a los jugadores más habilidosos, saliendo rápidamente a la contra, como ya hacía en el Valencia. Ahí son claves jugadores como Rakitic y Reyes, mediapuntas que apoyan en todo el campo, llegando una vez uno y otra otro. Sorprende como Reyes se libera del yugo de jugar en banda, dejándosela al lateral (ayer Fernando Navarro) para librarle de trabajo a Rakitic. Si a esto le sumamos un delantero como Negredo, que a pesar de no estar en forma, marca, asiste y crea peligro, poco puede hacer el rival.

Sabedor de todo esto, Anquela decidió sacar el trivote para destruir el juego creativo de Sevilla. Y le servía. Otra cosa era a la hora de salir con la pelota jugada, y es que Iriney es todo lo buen destructor que ustedes quieran, pero para dar un pase, ya puedo ir yo y hacerlo mejor. Por lo menos el equipo jugaba junto, con un 4-1-4-1 a la hora de defender, que pasaba a ser 4-3-2-1 al atacar. Algunos veréis descabellado el planteamiento de Anquela. Yo lo vi bastante acertado, ¿por qué? Pues precisamente por la presión arriba del Sevilla. El entrenador buscaba una segunda jugada a través de Ighalo, cuya consigna era fijar a los centrales (lo hizo), pararla y darla de cara o al desdoble de un mediapunta (lo hizo), iniciar la jugada con los medios para darle pausa al juego (lo hizo), y por último, buscarse las habichuelas (vaya que si lo hizo). Lástima que ni Orellana ni Brahimi supieran sacar partido de esto. El chileno porque no tiene fuerza como para llegar, ni chutar; al francés, habría que ir diciéndole que el futbol es u juego de equipo. Otra cosa es que este planteamiento saliese. 

Ahí también cuentan los jugadores, ya que ayer fueron sombras de ellos mismos (la mayoría). De hecho, si retrocedemos meses atrás, partido de copa de Europa, Dortmund-Madrid donde ganaron los bávaros, el planteamiento del entrenador del Borussia era el mismo: balones al único punta, Lewandowski, para que peinara a sus mediapuntas que le doblaban (Reus y Gotze). Con un trivote para anular la creación blanca. Esquema calcado, no así el resultado.

Mientras que arriba el Granada no carburaba, atrás se dejaba la piel. Con un Mainz esplendido anulando todo el partido a Negredo, salvo en el segundo gol, su único fallo, pero que sentenció el partido. Diakhate va cogiendo el tono, pero sigue estando muy blandito. No puede ser que Navas le gane metiéndole cuerpo, para luego realizar una chilena al más puro estilo Oliver Aton. Nyom volvió a ser esa pantera que corría toda la banda de arriba abajo, y hasta tuvo dos claras ocasiones de gol delante del portero, donde la precipitación le jugó una mala pasada al lateral camerunés (buena iniciativa de Nyom, viendo que Reyes en defensa es negativo). Siqueira sin embargo no estuvo acertado, bien es cierto que le toco la pareja de baile más complicada: Navas. En la segunda parte le dio un tirón en la espalda y tuvo que ser sustituido por Ortiz.

El partido era intenso, con claro dominio sevillista, que lo hizo patente a la salida de un córner por banda derecha. Rakitic puso el balón en la cabeza de Kondogbia, que con esa altura solo tuvo que girar el cuello para rematar a bocajarro hacia el fondo de las mallas que ayer defendía Roberto. Vaya tela el portero, que parecía que le habían echado aceite en los guantes, pues no atrapaba ninguna. Muy inseguro a la hora de salir por alto, y mal defendido un uno para uno contra Negredo; suerte que el de Vallecas perdonó.

A partir de ahí, el Granada se soltó la melena y empezó a combinar más. Lástima que Brahimi parase tanto el juego regateando sin sentido. Se veía también que el trivote de Anquela servía para no hacer tan largas las distancias de los medios, ya que en el anterior partido acabaron asfixiados. Anquela sustituyó a Ighalo y Nyom extasiados por Aranda y Torje. Mal hecho, porque a pesar de la calidad de los segundos, los primeros le ponen corazón y garra, y eso a veces vale más. Cualquier equipo podía marcar a partir de ahí; el Granada la había tenido en los pies de Nyom y el Sevilla inquietaba con las internadas de Navas, hasta que un buen movimiento de Rakitic por la izquierda, generando el tres contra dos en banda, hizo que el croata se quedara solo para servir un balón perfecto a la cabeza de Negredo. Segundo tanto de Sevilla y fin del partido prácticamente.

El tercero, anecdótico, fue a la salida de un córner, donde Negredo no acertó a cabecear a puerta, y el balón parecía que se perdía más cerca del banderín de córner que de la portería. Pero aparecía el chileno Medel, incansable para libre de marca (Orellana pensaba en las musarañas) anotar a placer el tercero.

Ni siquiera cuando el Sevilla dejo de atacar y morder el Granada pudo hacer gol, y es que este equipo parece negado de cara a puerta. Suerte que ya el partido que viene contamos con El Arabi. Esperemos sobretodo un cambio de actitud de algunos jugadores, que no les faltan aptitud, pero parece que no se enteran que hay que remar TODOS hacia el mismo lado: la salvación

sábado, 26 de enero de 2013

Sistema de juego del Betis


Hoy vamos a analizar el sistema de juego de uno de los equipos que mejor futbol practica en nuestra Liga. No es un futbol de toque incesante hasta aburrir, ni de contrataque. Es algo más táctico que técnico el sistema de este Real Betis, el cual le ha ayudado a alzarse hasta la 4º plaza de la Liga por encima de equipos como Valencia o Málaga.

Aparentemente, el esquema de Pepe Mel podemos decir que es un 4-2-3-1, pero analicémoslo más detenidamente: de los 11 jugadores que salen al terreno de juego, solo 3 tienen una posición fija, que son los dos centrales y el portero. A partir de ahí, cada jugador, sea cual sea su nombre o su calidad técnica cumple una determinada función que hace que el rompecabezas funcione.

Los dos laterales que juegan actúan casi de carrileros largos, pero no los dos a la vez, sino que depende de si el míster pone un extremo en una banda o en la otra, ya que rara vez juega con dos extremos puros. Es decir, si en una banda pone por ejemplo al extremo Vadillo, su lateral se preocupa más por la defensa, siendo el lateral opuesto el que actúe de carrilero.

La posición del extremo puro también depende mucho del lateral que vaya a jugar; es decir, si va a jugar el veterano Ángel, que ya no está para correr de arriba abajo todo el partido, lo más probable es que en esa banda este el extremo. Y una cosa fundamental es que Mel no esta tan pendiente del otro equipo para elegir bien estas posiciones, sino que ya se ha ganado el respeto de que sea el rival quien juegue según el plantel del entrenador bético, y no al revés. Muy interesante también los extremos de la plantilla, que siempre tienen la consigna de encarar y buscar el uno contra uno, además de estar bien pegados a la línea de cal para que tanto los centrocampistas, como los delanteros tenga todo el espacio central. Se da también el caso de que puede jugar con dos extremos aparentemente fijos, abriendo el campo todo lo posible, pero normalmente será más cuando vaya con un marcador adverso, renunciando a jugar más la pelota y llegar más al área de forma directa.

El pilar básico del Betis está formado por un triángulo en el centro del campo: un doble pivote, normalmente formado por Cañas (jugador muy tapado que siempre cumple y su labor recuperadora es fundamental) y Beñat, el cerebro del equipo. El otro vértice lo compone un media punta, no necesariamente creativo si esta ya Beñat, que baja sin problema hasta el centro del campo a recibir, haciendo que un pivote suba su posición para que se mantenga en todo momento ese triángulo central. Esto funciona a la perfección si se trata de un centrocampista tipo Salva Sevilla, con gran visión de juego que le hace ver donde tiene que estar en cada momento para no molestar o faltar en la salida de balón, al mismo tiempo que llega a rematar o a servir balones.

Por ultimo tenemos a dos delanteros. Uno que actúa como delantero centro, fijando a los centrales y dándole salida a su equipo si éste está atascado atrás y muy presionado. Otro, que juega más escorado a una banda, o de media punta (intercambiándose con la media punta inicial su costado, sin que el triángulo anteriormente mencionado se deteriore). Ya sea el delantero o el media punta el que este en banda, tendera a irse al centro igual que “x” tiende a infinito en una asíntota, buscando crear superioridad en mediocampo primero, para luego volcar el ataque a un costado con su respectivo centro al corazón del área, donde llegan a rematar el delantero centro inicial, y sorprende desde atrás el otro banda y el media punta.
Viendo esto, es muy complicado marcar a los hombres de arriba del Betis, por su continua movilidad; además, si el otro equipo se preocupa por tapar a Beñat, deduciendo que es el único creador de juego, el media punta se sitúa en esa zona para ser el base del equipo, es decir, dentro del mismo esquema Pepe Mel introduce un Plan B, que por ejemplo les faltan a equipos como el Madrid, donde tapando a Xabi Alonso, tapas la creación de juego.

Por si fuera poco, el entrenador verdiblanco no idea este sistema para solo usarlo con sus titulares, sino que tiene varios jugadores en la plantilla que pueden actuar en varias posiciones, dando entrada a otros no habituales que suplan perfectamente a los más requeridos por el técnico. Por ejemplo, si el delantero referente, Jorge Molina no juega, puede ser Rubén Castro quien ocupe su posición, teniendo a Salva Sevilla, Pozuelo, Juan Carlos o Campbell quien haga la labor de segundo delantero.

En definitiva, no es de extrañar que este equipo este haciendo tan buena campaña, llegando a los cuartos de final de la copa, siendo cuartos en Liga y jugando además tan maravillosamente al fútbol. Me quito el sombrero ante ti, Pepe Mel, sin duda, uno de los entrenadores del año.



lunes, 21 de enero de 2013

Jornada 23 en la Premier


Demos un repaso a lo mejor de la Premier League en esta vigésimo tercera jornada. 
Comenzamos con el derbi londinense que enfrentó al Chelsea de Rafa Benítez contra el Arsenal de Wenger. El conjunto blue salía con su once de gala, salvo Ramires que sustituía a David Luiz, que se perdió el choque por molestias en su tobillo. Por su parte, Wenger no podía contar con los lesionados Arteta (su falta se nota a la hora de sacar la bola), Podolski y Chamberlain, así que alienó a Diaby y Coquelin en el doble pivote, escorando a Cazorlita al costado izquierdo y con Wilshere ejerciendo de mediapunta. Rápidamente se vio que el partido sería de esos con muchas ocasiones, pues en cinco minutos ambos equipos ya habían ejecutado varios disparos; pero no fue otro que el asturiano Mata quien abrió la lata (nueva asistencia de Azpilicueta). Supuso un mazazo para el Arsenal verse por detrás nada más empezar, y aún más cuando el meta gunner Szczesny cometió un penalti muy tonto. Gol de Lampard, que está a solo 8 tantos de ser el máximo goleador del equipo londinense. Increíble si tenemos en cuenta que no es delantero. Buen partido de Torres, que pese a no marcar, su nuevo look le dotó de más velocidad, se le ve con más chispa. Bueno para el Chelsea. Walcott consiguió acortar diferencias en la segunda mitad, y pese a la entrada de Ramsey y Arshavin, el Arsenal no inquietó hasta los momentos finales, donde una gran parada de Cech a tiro de Giroud le dio los 3 puntos al Chelsea. Cazorla, a pesar de que cumple donde juegue, le faltó protagonismo, y eso que dio la asistencia del gol. Por otra parte, tanto Giroud, muy activo, como Wilshere, que jugó en su posición favorita fueron los mejores de los gunners a mi gusto.

El partido Swansea-Stoke fue otro de los destacados. A pesar de que los goles se hicieran esperar hasta la segunda mitad, todos fueron de bella factura. El primero llegó por obra del excelente lateral izquierdo del Swansea Ben Davies, que tras regatear a la defensa de Stoke, resolvió como si fuera un delantero puro. Luego llegaría el doblete de De Guzmán. El primero de falta directa, y el segundo tras un gran pase de Graham. El tanto del honor lo marcaría un grande, Michel Owen. Los viejos rockeros nunca mueren. Michu, pese a no marcar, cuajo una gran actuación en la presión, haciendo que el Stoke tuviera que jugar al pelotazo (cosa que a ellos tampoco les preocupa ni les incomoda).

El equipo que más reforzado ha salido esta jornada seguramente sea el Liverpool, que tras su goleada por cinco goles a cero ante el Norwich, seguro que coge más confianza. Se nota la llegada de Sturridge como escudero de Suárez, con la que los de Merseyside han ganado más gol. Sumado al gran estado de forma de Gerrard (que contribuyó con un gol) y al de Downing (una asistencia) han hecho que el Norwich salga de Anfield con un severo e incluso excesivo correctivo. Con el partido ganado, Brendan Rodgers, entrenador del Liverpool, quito al pivote Leiva para probar ahí con Allen y Gerrard. El capitán tiene tanta clase que puede jugar ahí, bien es cierto que éste era un rival menor y el partido ya estaba decidido.

Otro partido a destacar es el Newcastle-Reading. Desde la marcha de Ba, los urracas no levantan cabeza. Tampoco ayudó mucho la alineación de su entrenador Alan Pardew, primero al no alinear a Obertan de inicio, y luego sustituyendo a Cabaye y Anita. Con todo eso, Cabaye adelantó en la primera mitad al Newcastle. Pero en el minuto 70 cambió el partido, entró Le Fondre. Le bastó medio minuto para marcar el primero. A los 6 minutos, marcó el segundo. Ambos a pase del mediocentro Kebe. Obertan (quien está llamando a las puertas de la selección gala) tuvo en sus botas el empate en el último minuto, pero una espectacular parada de Federici evitó el empate.

Partido intensísimo el disputado entre Tottenham y United. Ferguson salía sin extremos y con Phil Jones junto a Cleverly y Carrick (trivote para salir a la contra, sistema un poco cagón, pero Sir Alex ya nos tiene acostumbrados a esto en partidos lejos de su estadio). Por delante Kagawa, que aún se nota falto de ritmo pero aun así no jugo mal como mediapunta, Welbeck, desaparecido, y Van Persie, que pese a no ser su mejor partido, volvió a anotar. A partir del gol, el Tottehnam se hizo dueño y señor del partido. Y ahí emergió la figura del mejor De Gea para sacarle las castañas del fuego a los diablillos rojos. Fatal  Ferguson, que como si del coco se tratase, hecho el equipo atrás, esperando contras que no llegaban, y fue el portero de los reds quien sostenía a su equipo, salvando incluso un mano a mano al norteamericano Dempsey. Pero quien la sigue la consigue, y tras varios disparos de Bale y Defoe, un pase de la muerte servido por Lennon acabo en gol de Dempsey; era el último minuto. Lo positivo para el Manchester fue la reaparición de Rooney, que jugó la última media hora.

·        Chelsea 2 – Arsenal 1
·        Wigan 2 – Sunderland 3
·        Swansea 3 – Stoke 1
·        City 2 – Fulham 1
·        West Ham 1 – QPR 1
·        Liverpool 5 – Norwich 0
·        Newcastle 1 – Reading 2
·        WBA 2 – Aston Villa 2
·        Tottenham 1 – Man.U 1
·        Soton 0 – Everton 0

domingo, 20 de enero de 2013

Granada-Rayo Vallecano


Al mal tiempo, buena cara. Así nos presentábamos hoy los cerca de 15.000 aficionados rojiblancos con la esperanza de ver un buen partido. Y lo vimos. Y ganamos. Hoy el equipo de Anquela si cuajó un gran partido que le hizo llevarse los tres puntos a la saca.

El  Granada salía de inicio Roberto en portería, que parece haberse hecho con la titularidad a pesar de las buenas actuaciones que venía haciendo Toño; Nyom, Diakhate, Mainz y Siqueira; Mikel como pivote acompañado por Recio; línea de 3 para Torje, Brahimi y Orellana, y arriba el nigeriano Ighalo. Desde que Benítez se lesionara contra el Valencia, el míster no ha encontrado un sustituto a la altura; ni Jaime Romero le convence, ni Angulo esta todavía al nivel de primera. Hoy le tocaba el turno al chileno, y no lo ha hecho nada mal.

Por su parte, Paco Jémez alineó a Rubén bajo palos; Tito, Amat, Jordi y Casado; Javi Fuego y Trashorras en el doble pivote; Vázquez por la derecha, Piti por la izquierda, y arriba Lass y Delibasic. Tras la lesión de la estrella Leo, Jémez planteo el encuentro con Deli actuando más de media punta, ganado todos los balones aéreos para que Lass o Piti buscaran la segunda jugada. No le funcionó muy bien gracias al inconmensurable trabajo de Mikel Rico, que parecía un pulpo sacando piernas por todos lados, y Mainz, pareja de baile de Deli, no le dejo recibir ningún balón con comodidad, soberbio el capital del Granada.
El partido empezó trabado, sin un dominador claro. Al Granada le costaba recuperar la pelota, se echaba en falta a Iriney, y el Rayo, sabedor de esta desventaja, hacia posesiones largas, pero sin peligro para el marco de Roberto. Hasta que en el minuto 13, Lass recibió el balón de espaldas a puerta en el área, se la paso a Piti que le doblaba como alma que llevaba el diablo; su centro paso entre Roberto y la zaga del Granada hasta llegar a Vázquez en el segundo palo, que solo, la tiró incomprensiblemente fuera.

A partir de ahí el Granada despertó, y emergió la figura de Ighalo, que cada vez va cogiendo mas forma de Pivote de Futbol sala. Conseguía bajar, aguantar y asistir a sus compañeros entre las torres del Rayo. Así llegaría la primera jugada clara para el Granada, que tras una internada de Torje, éste asistió al delantero nigeriano que no llego a rematar por escasos centímetros.

Con Mikel en plan estrella, y Recio acompañándole en la salida, el Granada era superior a la hora de crear peligro en la meta de Rubén. Buen colega le han buscado a Mikel, que le libera de carga ofensiva y de terreno recorrido, haciendo que éste brille como en las grandes galas.
Con este dominio llegaría el primer gol local. Tras una masticar bien la bola, Mikel sirvió un balón largo para la carrera de Nyom (sensacional su partido de ayer, con grandes coberturas defensivas, impenetrable por su lado, y dejando pinceladas en ataque). Sólo el camerunés creía en su carrera, quizá porque los demás veíamos clara la ventaja de Casado. Nos equivocamos, y el lateral del Granada consiguió llegar a línea de fondo, servir el balón a Ighalo, y fue Amat quien sin querer, introdujo el esférico en su propia portería. A parte de su autogol, Amat tiene muy buena pinta de cara al futuro: central alto y contundente a la par que rápido. Buen juego de pies y gran salida de pelota.

Tras una serie de intercambio de golpes, o remates, por parte de ambos equipos, con tiros de Vázquez por parte rayista y de Ighalo por el Granada, concluyo la primera mitad.

Paco Jémez dio entrada en la segunda mitad al canterano sevillista José Carlos en detrimento del fallón Vázquez. Lo cierto es que el joven chaval era bastante talentoso y muy desequilibrante, no entiendo su salida de Nervión. Por suerte para nosotros, Anquela supo leer perfectamente el partido, y retrasó a Orellana para tapar a José Carlos, mientras Siqueira ejercía como tercer central, emparejado con Lass por aquello de que los dos son dos galgos que corren más que yo al buffet del Telepizza. Ya no supimos nada más del Rayo en ataque.

Mientras, Ighalo, Brahimi y Torje mantenían su guerra particular contra la defensa del Rayo. El delantero nigeriano, muy activo, fue sin duda el mejor del Granada en ataque, aunque es cierto que pecaba a veces de chupón. El Granada llegaba con peligro, pero no finiquitaba el partido, y eso ponía de los nervios a cada valiente que ayer acudió al estadio. Ocasión clarísima de Orellana, que iba solo contra Rubén, y al lado contaba, en boca de gol con Brahimi. El chileno optó por el regate, y le salió mal. Mosqueo tremendo de Brahimi, por cierto, que ayer volvió a deslumbrar con sus mágicos regates, y tuvo una buena ocasión con un disparo desde la frontal que el portero desvió a córner.

Tras el tremendo desgaste físico que sufrieron Brahimi y Torje, fueron sustituidos por Ortiz, jugador que defensivamente cumple, pero no llega al nivel de primera, y por el flamante fichaje, Aranda. De sus botas salió precisamente el segundo gol. Tras una excelente prolongación de cabeza de Ighalo (una más), el delantero fijo a su par, e incluso a otro más. Cuando parecía que el recorte y el disparo era la opción más viable, inteligentemente paso atrás, donde Recio aguardaba completamente libre de marca. El medio disparo fuerte, raso y a un lado del portero. Golazo. Gran broche al magnifico partido que cuajó ayer el conjunto de Anquela, sin duda el más reforzado en la tarde de ayer.

Como siempre, ejemplar partido de Mainz, el capi, que supo mantener a raya a Delibasic, anulando la estrategia de Jémez. Supo mandar en la defensa y transmitir esa garra y lucha que le caracteriza. Buen partido de Diakhate también, que poco a poco va entendiéndose mejor. Y sorprendentemente, increíble estuvo Orellana, que salvo por la clara ocasión que desperdició, salió ovacionado del campo por su enorme esfuerzo en tareas defensivas.

Sorprendió que el entrenador rayista no hiciera algún cambio para intentar ir a por el partido. Ayer Javi Fuego estuvo bastante ausente, gracias entre otros a que Mikel le comió la tostada.
Un jugador a tener muy en cuenta también del Rayo es Tito, el lateral derecho. Me encantaron sus movimientos con  sin balón. Su visión de juego, su capacidad para el regate y su largo recorrido le hacen un jugador excepcional, que casi probaría como centrocampista; sin duda un jugador de los tapados, que hace muy poco ruido, pero que siempre cumple, y con nota.

Por último, felicitar a la hinchada del Rayo, que sin duda demostraron ser de las mejores aficiones de España con la cantidad de vallecanos que vinieron. No me extraña que The Special One se quitara el sombrero ante ellos. Yo también me lo quito.

lunes, 14 de enero de 2013

Motivos del fracaso del Real Madrid en Liga


Bueno, a pesar de ser reacio a comentar o hablar del Real Madrid debido a que ya todos los medios, periodistas “profesionales”, y el resto de los 43 millones de entrenadores de elite que hay en España ya hablan, y muy mucho del conjunto blanco, he decidido que esta diferencia histórica de puntos  que mantiene con su eterno rival sea un breve paréntesis en mi blog.
Si aún no han mirado la clasificación y han visto con caras de terror o con sonrisas burlonas y crueles, el Barcelona, líder indiscutible de esta Liga, aventaja al Madrid en 18 puntos, y solo llevamos la mitad del campeonato disputado…
Pues bien, quería analizar un poquito, así por encima cuan el rico glasé de mi tarta de cumpleaños, los problemas y las situaciones que han llevado a que se produzca esto. Aviso al lector, por si acaso, que yo soy seguidor del Real Madrid, al igual que de otros muchos equipos, pero este equipo en concreto es uno de los que me tocan la fibra y me pone cachondo.

Ante todo, me sorprenden todos esos eruditos que achacan el 90 % del FRACASO blanco al entrenador, José Mourinho. Ojiplático me quedo cada vez que leo a esos expertos del balón criticando a este pedazo de entrenador, capaz de plantar cara e incluso ganar al súper-mega-híper Barsa. Para empezar, este hombre es de los pocos que vive por y para su trabajo, no dejando NADA al azar, ramera despiadada. Sabe ver el potencial de todos sus jugadores, sabe sacarles el máximo rendimiento (siempre que ellos quieran, a ver si ahora el tío va a ser el niño Jesús). Puede que no inculque ese juego de toque que puso tan de moda recientemente la Selección (si, antes del Pep estaba un tal Luis Aragonés que jugaba ya a eso), y en lo entiendo, ya que al Special One le va más el futbol premier. No es culpa suya si los grandes le quieren, y él no va a cambiar su esquema sea la liga que sea, porque Mou solo piensa en una cosa: ganar.

Bien, hablando ya claro, el principal problema del Madrid son los jugadores, que son los que para eso juegan y que no son capaces de dar 5 pases seguidos, tirar entre los 3 palos, defender a su par o driblar como es debido. Es evidente, y e que diga lo contrario, por favor, dedícate al parchís, que hay jugadores muy por debajo de su nivel. Jugadores como Arbeloa, Ramos, Coentrao (error de Mou, que se empeñó en traerlo), Khedira, Xabi, Di María, Ozil, Modric (le está costando adaptarse), o Benzema
.
Arbeloa y Ramos, internacionales sorprenden este año por su irregularidad. Arbeloa no será Alves, pero nadie le gana la posición, y en las coberturas es el mejor. Bueno, era. Al igual que Ramos, que unas veces nos da una de cal y otra de arena.
Coentrao y Di María son el gran fracaso este año. Ninguno da la talla para ser siquiera suplente en un club de elite, muy bajos de forma. Di María in esa chispa suya que le hace tan vertical y eléctrico, y el fumanchu solo Dios sabe qué hace con su vida.  
Xabi se ve cansado, impreciso y fuera de sitio, raro en él. Este año se prodiga muy muy poco por el área rival. Khedira no ayuda nada en la creación, y tampoco en la contención este año. Va en sentido contrario al balón, justo lo opuesto del deber de todo mediocentro.

Ozil, jugador con una clase inconmensurable parece el semáforo de al lado de mi casa que solo dura 15 segundos en verde. Va cogiendo físico, pero le falta más protagonismo, como el que tienen esos jugones del barsa que siempre quieren tener ellos la pelota como niños abusones. Y Benzema, miau miau, vaya cortina de humo. A pesar de que mi ídolo, el periodista Maldini le tiene en más estima que a otros, cada vez veo que este hombre no es el delantero que necesita el Madrid. Es bueno, ojo, muy bueno, pero el Real Madrid es el mejor equipo de la historia y siempre ha tenido a gente que ha marcado la talla, no por la técnica que tiene y lo que puede llegar a ser, sino por lo que demuestran nada más llegar. Higuan no será, por ejemplo, el delantero más talentoso, el más goleador, o el mejor que haya, pero lo da todo por la camiseta, y eso a veces hace más que el talento…

Por último, y aunque me cueste la cabeza, Iker, el mejor portero para mí de la historia por sus paradas antológicas, tampoco está a su mejor nivel y en ese sentido, apoyo a Mou con su suplencia, y desde luego comparto su aversión a esa gente que le h faltado el respeto a un portero como Adán. Si el míster dice que está mejor, es porque así será, no porque quera joder a nadie, y menos al Madrid.

Viendo esto, no quiero quitar tampoco yo hora culpa al míster, que la tiene también, pero hombre, que venga este tío, que dicen que es tan malo, y bata con su manera sucia e impura de estilo de juego el record de puntos y goles…algo no habrá hecho tan mal. Ya oigo al típico decir que claro, con ese equipo cualquiera, bueno, pues el mismo equipo este año está donde está por su falta de compromiso hacia el entrenador, al resto de sus compañeros y lo que es más importante, a la afición y al escudo más noble de la historia. Solo por el hecho de llevar tanta historia en sus camisetas, los jugadores del Madrid tiene que salir a muerte todos los partidos que faltan, a pesar de que la liga esta perdida, pero eso significa ser jugador del mejor club de la historia.

Tampoco me vale que la gente diga que Mou ha traído a los que él quiso, porque de haberlo hecho, se habría gastado cientos de millones, debido a que el simple hecho de que el Madrid se interese por un jugador, sea el que sea, aumenta su precio a 40 millones, véase Moura, Coentrao o Modric, jugadores que no deberían superar los 10 millones (como mucho).

Otro tema que afecta al club en mayor o menor medida es la tensión que hay con los medios de comunicación, pero eso ya son temas extradeportivos que vosotros sabréis interpretar mejor que yo.
Por ello, si alguien vuelve a querer inculpar a Mou de la situación actual como cabeza de turco, que medite y recapacite, pues el fanatismo, en este caso, el anti fanatismo que provoca el técnico portugués es más inmerecido, injusto e inefable que el balón de oro perdido de Raúl, Iniesta, Xavi, etc.

domingo, 6 de enero de 2013

Granada-Valencia


Para los que pensaron que asistir ayer al estadio de Los Cármenes seria más entretenido que ir a ver la cabalgata se equivocaba. Partido soso, uno más del Granada, y por mucho que el árbitro intentara animar el encuentro sirviendo su propia cabeza en bandeja de plata gracias a sus notables errores, el partido no se animó.

Ambos equipos salieron en busca de los 3 puntos desde el principio con ocasiones de los dos, pero ninguna clara. Después de un mes, ya se empieza a ver a otro Valencia, que busca más el balón y  Jonas, busca siempre acabar las jugadas para evitar posibles contras y por encima de todo, busca la victoria desde el primer minuto. Valverde salió de inicio con Alves en la portería, Pereira, Rami, Costa y Guardado atrás; Albelda y Parejo de doble pivote, con Banega de enganche; y arriba Jonas, Piatti y Soldado. En los primeros 15 minutos ya lo habían intentado desde fuera del área Parejo, Banega y Jonas, todos sin suerte. A pesar de empezar fuerte, poco a poco se fue desinflando: poca participación de Soldado, Banega espeso y Albelda, que ya no está para estos trotes, se veía superado por la velocidad y exigencia del centro del campo.

Por su parte Anquela saco a su once de gala, o al menos, a los pocos que siguen tras la marcha de El Arabi a la Copa África y Machis al Sudamericano. Roberto bajo palos, con Nyom, Iñigo López, Mainz y Siquiera en la retaguardia, Iriney y Mikel Rico en el doble pivote, línea de tres por delante con Torje, Brahimi y Benítez y arriba Ighalo. Las estrellas locales, Benítez y Rico no empezaron en su salsa, y lo notaron los espectadores que no tardaron en empezar el murmullo en la grada. Lentos y espesos los dos solo conseguían perder el balón. El peligro llegaba por la derecha, con Torje, que aprovechaba que Guardado no es lateral puro y estaba loquito por sumar más en ataque que en defensa. Buen centro suyo que Ighalo remató mansamente a las manos de Alves. Lento Ighalo también arriba, que le costaba más soltar el balón que a Messi darle las gracias a Villa.

Todo discurría con aburrimiento, cuando Undiano, correcto a su manera (de sacar más tarjetas que faltas se hacen) decidió que mandaba él en el partido y se sacó de la manga una mano de Mikel que le supuso la segunda amarilla. Minuto 30. El partido quedaba 10 vs 11 (mas Undiano). Seas del equipo que seas, si ahí ves mano tienes serios problemas de vista, autoestima y hasta esquizofrenia.

El Valencia supo leer el partido perfectamente, y viendo que atrás Iñigo y Mainz estaban espléndidos, Jonas y Piatti retrasaron su posición para crear un cinco para dos contra Iriney y Brahimi. Benítez y Torje, intentaron ayudar en el medio, pero claro, entonces te suben los laterales y te mataban. Parecía que solo quedaba esperar a que el Valencia decidiera cuando, como y donde. Llegábamos al descanso.
Lesión de Benítez que hizo temerme lo peor, pues su sustituto, Bryan Angulo, no le veo todavía nivel de primera. Me calló la boca. Tanto Valencia como Granada comenzaron tanteando el terreno, como si de dos púgiles se tratara, midiendo los huecos del otro. Y ahí apareció el jugador venezolano, para batir con una exquisita vaselina con el exterior de su bota izquierda a Alves. Fiesta en la grada y reacción inmediata de ambos entrenadores. Valverde quito el lastre de su equipo, Albelda (jugador al que admiro, pero que debe saber cuándo retirarse) y metió a Valdez. Por su parte, Anquela quitó a un Torje desaparecido y metió al reaparecido Yebda. Ahí se acabó el partido. Primero, porque el técnico local descolocó a todo el equipo poniendo a Angulo en la derecha, Brahimi en la izquierda, Ighalo solo contra 4 arriba, y Yebda, que estaba más acojonado por recaer de su lesión que yo viendo Viernes 1 parte VIII, revoloteando, no hizo más que molestar. Mas hubiera valido Diakhate o Lucena, no tan técnicos pero si le hubieran echado más memoles.
Por su parte, recital de Parejo, que parece que con Valverde si tiene cabida en este equipo, y éste se lo demostró manejando el partido a su antojo. Ya solo era cuestión de tiempo que cayera el gol visitante. Y llegó en un córner, inventado por el árbitro (en serio, no se quien leches puede pitar esos córner), Valdez atrajo a todos al primer palo, y Piatti, con una rosquita perfecta, puso el balón en área pequeña (balón del portero) para que Jonas, que fintó  Iñigo (único fallo suyo en el partido) remató a placer.

Entre tanto, si Parejo sobresalía en el equipo che, Brahimi lo hacía en el conjunto rojiblanco, ya que parecía Messi, driblando a todos, haciendo que el público se levantara de sus asientos a cada regate de ensueño, parecía que jugaba a la consola. Espectacular. Con uno iguales en el marcador, el Granada acabó bajando los brazos, teniendo sólo como bazas ofensivas a sus dos delanteros. Pelotas directas de Roberto que Ighalo solo podía mirar de lejos, pues tenía encima a los dos centrales y a sus compañeros demasiado lejos. Pudo llegar el gol valencianista en otro córner inventado que Mainz sacó bajo palos.
Minuto 82, balón al área de Banega (debe recuperar aun su mejor nivel) que Soldado no llega a controlar (pésimo partido del internacional español, no rascó bola, las pocas que le llegaban no sabía qué hacer, y personalmente, me parece un jugador sin honor, que pasa más tiempo en el suelo para perder tiempo o llorando cuando no le tocan, y va repartiendo más estopa que un antidisturbios; sinceramente, no tiene nivel ni personalidad para ser internacional le pese a quien le pese). Nyom, que no va a despejar, sino que se queda esperando dentro del área a que la pelota le llegue, deja que le roben la cartera y acaba… victoria che.

Quien sabe cómo hubiera acabado el partido si Undiano no hubiera errado (tantas veces). En cualquier caso y visto lo visto ayer, justa victoria valencianista. Como nota positiva del conjunto local, me quedo con las grandes actuaciones de Iriney, que supo el solo contener a los mediocampistas visitantes el sólo (brahimi en defensa era nulo) contra los tres de Valencia; y de Brahimi, que en ataque volvía loco a todos los jugadores del Valencia de tal manera, que solo por verle merecía la pena pagar la entrada. Y por último, me parece destacar por encima del resto como mejor jugador del partido al capitán Diego Mainz, central que se consolida atrás, que cortó todo lo que le pasaba al lado y supo salir cuan libero de antaño. No exagero si digo que llama a las puertas de la Selección (total si va gente de la categoría de Soldado…); así que Don Vicente, si lee esto, es un jugador a tener en cuenta.